Los mudras tienen su origen en la tradición hindú, pero también se utilizan desde hace muchos años en el Tíbet, Japón o China. Son gestos realizados con las manos y los dedos que, cuando se realizan, calman la mente, ayudan a la concentración y producen bienestar y felicidad. La palabra mudra en sánscrito significa «sello» o «señal», y simboliza el sello entre lo humano y lo divino. Son una parte muy importante de la práctica del yoga y la meditación. En Hatha Yoga hay unos 24 mudras, aunque hay muchos más, y cada uno de ellos tiene un significado y una intención.
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Úsalos para activar los chakras.
Cada uno de los dedos simboliza uno de los cinco elementos que componen el universo. Al unirlos de diferentes maneras para realizar los mudras, se activan los chakras o puntos de energía que tenemos repartidos por todo el cuerpo.
Hacerlas mientras practicas yoga te ayudará a conseguir tus objetivos y generar algún tipo de energía positiva. En la meditación se utilizan mudras para ayudar a la mente a estar presente a través de esa conexión en el cuerpo, como la típica posición donde se unen el dedo índice y el pulgar que todos asociamos con el conocido OM.
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Haz mudras aunque no hagas yoga
Pero no es imprescindible que practiques yoga o medites para beneficiarte del poder de los mantras. Utilizarlos en tu día a día te permitirá estar más conectado contigo mismo, sentirte más tranquilo, más concentrado y te ayudará a combatir situaciones estresantes. Además, puedes hacerlos en cualquier lugar y nadie lo notará, incluso en el trabajo.
Puedes cambiar por completo tu estado de ánimo y energía si te detienes cada pocos minutos, respiras conscientemente y haces un mudra, especialmente si los practicas por la mañana al levantarte. Para ello, lo ideal es que te sientas con la espalda recta. Puedes hacerlo en el borde de una silla o un cojín. Luego cierra los ojos y adopta el mudra que has elegido y presta atención a tu respiración.
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Aquí tienes algunos mudras que te serán de gran utilidad en tu día a día:
Namasté mudra
También llamado Ajali Mudra, es uno de los más utilizados en el mundo. Las palmas de las manos se juntan, frente al pecho, con los dedos extendidos y apuntando hacia arriba, significa reverencia y respeto. Si lo haces acompañado de la palabra namaste, es como si saludaras a tu naturaleza divina, al mismo tiempo que reconoces la naturaleza divina de los demás. Usarlo te ayudará a sentir respeto por ti mismo, te ayudará a concentrarte y disminuirá tu estrés y ansiedad.
Mudra de barbilla
También es bien conocido. Lo asociamos inmediatamente con la meditación y los momentos zen. Si necesitas calmar tu mente, este es el mudra perfecto. Hazlo en momentos de estrés y te ayudará a calmarte y meditar. La posición ideal para hacerlo es sentado, con las manos sobre las rodillas: levanta las palmas de las manos, junta el índice y el pulgar y estira los tres dedos restantes.
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Usha mudra
Este mudra produce paz y calma la mente. Es ideal para hacer por la mañana, ya que aporta serenidad. Además, significa amanecer. El gesto es más común de lo que parece en la cultura occidental. Para ello, cruza los dedos y deja las manos apoyadas en tu regazo.
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Para ello tienes que unir la punta de tu pulgar con la punta de tu dedo meñique y anular. Mantenga los otros dos dedos rectos. Este mudra actúa directamente sobre tu salud. Ayuda a eliminar toxinas y aliviar problemas estomacales.