Desde la perspectiva del ejercicio, la actividad física y el deporte, la fuerza representa la capacidad que tiene un sujeto para superar o soportar la resistencia, y esta es sin duda una de las cualidades físicas más básicas en las que se puede progresar cuando se entrena adecuadamente.
Este tipo de entrenamiento también se llama ‘entrenamiento de resistencia’ y hoy se considera parte básica de un programa de fitness, explica Eduardo Medina Jiménez, autor del libro ‘Actividad física y salud integral’ (Ed. Paidotribo). Con este tipo de entrenamiento se pueden obtener muchos beneficios para la salud. Por ejemplo:
– Aumento de volumen o masa muscular
– Prevención y tratamiento de lesiones.
– Beneficios cardiovasculares
– Retraso e incluso recuperación en el proceso de pérdida ósea
– Reducción del riesgo de obesidad
– Mejora de la apariencia física.
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Ejercicios con tu propio peso
La fuerza se puede trabajar con cargas, por ejemplo, con pesas o mancuernas. O con ‘autocarga’, es decir, el propio peso del cuerpo ofrece la resistencia suficiente. Se suele utilizar para el desarrollo de la resistencia muscular, ya que permite muchas repeticiones (20 o más). Por supuesto. Hay algunas que son más intensas y que conviene disminuir las repeticiones, ya que desplazan gran parte del peso del cuerpo, por ejemplo, las flexiones con barra.
Para empezar a ganar niveles aceptables de fuerza, puedes optar por ejercicios fáciles para principiantes que utilizan su propio peso o añaden cargas ligeras como mancuernas. Toma nota de esta rutina y empieza a entrenar ya.
